TESIS EN COMUNICACIÓN PARA EL DESARROLLO

EN ESTE BLOG ENCONTRARA TODOS LOS ARTÍCULOS, LINKS E INVESTIGACIONES DE LOS DOCENTES DE LA UNIVERSIDAD JORGE TADEO LOZANO SECCIONAL CARIBE, PATRICIA RUIZ ACERO, GERARDO FERRO ROJAS Y DAVID CANEVA AKLE. ESTOS DOCUMENTOS CONFORMAN LA TESIS FINAL SOBRE INTERPELACIÓN Y REPRESENTACIÓN JUVENIL A TRAVÉS DEL PROGRAMA BANDERAS EN MARTE DEL CANAL PÚBLICO NACIONAL "SEÑAL COLOMBIA"

7/20/2006

REFLEXIÓN SOBRE DESARROLLO Y MODERNIDAD

Resulta difícil tratar de sintetizar lo que se asimila en un hecho abstracto como es la volatibilidad de la idea sobre una única verdad.
El conocimiento y remembranza de títulos y citas de autores famosos, es espasmosa, y sobretodo inoriginal, teniendo en cuenta que existen conceptos previos, que alimentan las mentes de pensadores a lo largo y ancho del planeta, resultando así en una repetición y fusilación de ideas que son comunes a toda la conciencia colectiva.
La ayuda básica de un tema elemental como el desarrollo de las sociedades racionales, se cimienta en el acto de la información pero no en el de la interpretación, y como es obvio las elucubraciones sobre un tema profundo, pueden resultar deslumbrantes y aclaradoras, pero, no siempre conllevan a una actitud cambiante. A veces son aceleradoras de pensamientos confusos que al no sentir un feedback, se dispersan.
Es ese el sentir de este escrito, pues no hay una claridad de acción para quienes vienen detrás de un sistema desdentado y que pide a gritos que se le mantenga sin una respuesta segura, sino más bien una apatía alienada, que parte de la repetición del piñón.
Las noticias son claras en información pero turbias cuando al fondo se quiere llegar. La repartición de los oficios coarta la universalidad de los mismos reflexionantes, sus posiciones son puras desde el contexto de su individualidad, pero difusas en el término del alma mater Sur Americana.
Es la coordenada típica de los pensadores antropológicos de "aquel lado del charco", el que se estimule la viabilidad soñada de la compenetración de las civilizaciones en un unísono clamor de paz, cuando su argumentación lógica, es crítica y totalitaria, con conocimiento, pero limitada al método racional.


Críticamente, es imposible la viabilidad de un sólo texto redactado por varios autores, en donde no existan títulos ni juicios valorativos, en donde la verdad etérea se manipule para formar un gran manifiesto de la verdad. La inviabilidad de tal proyecto se debe a que la gran tela de la que todos se quieren cobijar tiene en sus bordes los lazos de aquellos que empujan para arriba o para abajo, para un lado o para el otro.

Me pregunto quién sería capaz de sacar los aportes constructivos de una charla entre Ryzsard Kapuscinski y Akbar S. Ahmed. Serían eternas horas de discernimiento entre un absoluto creyente del Islam como salida al enredo, contra la liberada visión de Occidente unido a las excepcionalidades del desarrollo y el progreso.
Cómo decirle a Akbar que su pensamiento sobre DIN (religión) es la confusión de las razas que pueblan Norteamérica. Cómo decirle a Kapuscinski que YUNDA (mundo), es limitado y sobretodo catalícticamente auto ordenado hasta el punto que Dios muere.
Solamente el descabellamiento del cerebro ampliará la conciencia de auto-limitación de Solzhenitzyn. Lo único viable para la mesura, será la extinción, pues la experiencia aterradora de la muerte del hombre moderno, tornará las mentes en una luz colectiva, donde no raye la agenda típica de muertes, derechos, denuncias, corrupción, desorden, embotellamientos, horas inflexibles, con mecanismos racionales inflexibles (reloj y calendario gregoriano), mentira y egoísmos.

Pero cómo alcanzar la proporción de las ideas descabelladas, si nuestra inmersión en el mundo es fanática y narcisista, desproporcionadamente habitual y frenéticamente hambrienta de los excesos relacionados con el consumo.

La síntesis de tales argumentos, son meramente empíricos y experimentales para el aprendiz, socavando en la castrada del instruido que asemeja un mundo mejor en la convulsión de su modernidad y la confianza propia de que el conocimiento y unión global lo conducirán a la interpretación mundial de una pluricultura evitando dilucidar la tajante posición del exitoso, el cual desata con métodos de producción la brecha entre aquel que altera su condición de humano implantándose bojotes de carne en alguna futura curva o modificando su codificación genética, y aquel aprendiz que nada en la jovialidad de una impuesta "buena vida" que se derrumba ante la incersión de factores traídos y poco acomodables a las condiciones básicas de supervivencia del tercer mundo o civilizaciones de primera ola de los autores Alvin y Heidi Toffler.

Ciclo veintiuno es el verdadero nombre de nuestro ritmo lineal, pues ahora el ritmo de este pseudo-modernismo infructuoso aleja las barreras de las fronteras nacionales y los sistemas ideológicos que vinieron después de la Guerra Fría e inclusive derrumba y convive con la dualidad de sistemas tan antiguos como la tenencia de propiedades de la Edad Media y la habilidad masificada del comunismo, adoptándolos a su dialéctica liberadora de derechos humanos apuntando siempre al progreso y al suplir de las diversas culturas aprendices de primera ola en un velo de "ayuda, o como dice el gringo demócrata de "intervención" que resulta ser en realidad la prolongación de Babilonia y su propio tiempo inventado, con oscuros grupos de 7 cabezas que en mérito de la actitud globalizante y engañosa, endosa sus pasiones más bajas de supervivencia con el Transnacionalismo que a todos puede ocupar en la etérea idea del trabajo en producción masiva y coayudante de los señalados países en vías de desarrollo y sus pobladores "ignorantes".

¿Quién es el realmente ignorante? Pregunto en frente de un PC y miró la luna llena de la madrugada a mi espalda, con el velo rosado que va emanando de la montaña y su desplegado sol de energías.
En definitiva la pregunta me atina a decir que no soy quién para juzgar mientras escudriño en la respuesta, y retiro mi pensamiento a un lado de ésta (la pantalla, la racionalidad) y pienso si realmente la tecnología ayuda o cohíbe, si es más puro y original olvidar el fascismo de la cátedra y contribuir a un futuro cultural, basado en el conocimiento ancestral y real genético del hombre y GAIA, dejando a un lado esos sentimientos de culpa de los hombres que reflexionan críticamente y desapegarse de las mundanidades que atrae el razonamiento lógico para así elevarse sin masa en torno a un viaje espiritual y de verdadero desarrollo como hombre atómico.

Hasta este momento van casi 7000 caracteres que identifican la singularidad del hombre postmoderno (7000 letras). ¿De qué manera? Pues simple; en la actitud ecocida que representa la significación de todo como individual y políticamente reglamentado por los textos o archivos, que en cuentas sumadas poblarían a la tierra de conceptos repetidos, citados y salvados por la amable PC que nos cableo la urdimbre de la Biblioteca de Babel que hemos querido organizar relativizando todo al punto de que la totalidad no concibe la reconciliación de la fe con las ciencias comprobables.

La razón por encima de la imaginación, la repartición de los oficios y la individualidad de los hombres, ha producido desviaciones de tipo espiritual, fundamentadas en el afán y olvido de ritos que procuran el orden y la consagración de los reales trabajos en pos de la comunidad.

Una lectura detallada de las civilizaciones modernas, da a entender que la prisa es la angustia energética que motiva a mover la masa.
Esta masa estática, asimila sus conceptos según la dinámica del Leit Motiv de la gula y es fácil comprender que la venta de clichés se sujete al imaginario de una mejor calidad de vida para aquellos que no la tienen.
Por tal razón, el éxodo es inminente. 26.000 jóvenes colombianos residen actualmente en países desarrollados, vendiendo su trabajo a un mejor precio y muchas veces en oficios que no corresponden a su formación.
Pero Kapushinski relata un cuento soñado en relación a la geocultura que conforma a los Estados Unidos. Chinos con barrios transformados, árabes con industrias prosperas y mano de obra barata y eficiente que traduce en mayores índices de productividad y demanda.
California, como esquina acopiadora de abanicos culturales, germina prospera y confiada gracias a los extranjeros que con conocimientos básicos aplican en el desarrollo de nuevos capitales financiados por su rebusque y la ilusión de que siempre habrá una nueva oportunidad.
Lamentablemente los hechos recientes demuestran que lo que Kapushinski señalo como una nueva civilización mestiza, se difumina en el ámbito de la seguridad del gran sueño americano pues es de saber que la prosperidad con la que muchos miraron al norte, ahora es un zozobra generalizada que promete el retorno del capital humano y económico a cada área que aporto en algún momento al gran monstruo de la opulencia consumista.

En medio de ráfagas de información e imagen se erige la mente del confuso latinoamericano, de ahí la enmarañada descripción de desarrollo que plantea Rosa María Alfaro en su libro ¨Una comunicación para otro desarrollo, Para el diálogo entre el norte y el sur¨. Su deducción lógica de los hechos le dan mérito a su sangre expedicionista y el clamor generalizado es: Explíquenos.
Los púberes aprendices no tragan más cuento y el conforme ciudadano contempla la posibilidad de rechazar su habitualidad según la escasez diaria que impone el exitoso, el cual ante sus juegos de poder es doblegado por la paciencia de los que no buscan el lucro.

La conformación de círculos de hermandad, constituye el cimiento de un real raza humana, con conceptos básicos de convivencia y coerción, con nivelaciones entre el egoísmo y la maldad que catalicen los deseos exagerados conforme a las necesidades básicas que hagan falta.
El permitir la diferencia de credos o ideologías, estimula la universalidad del ser humano. La aceptación del otro como otro, clasifica también como factor de avance generacional.
Permitir que los conocimientos sean ofrecidos libremente y sin mal interpretaciones es básico para la idea de ser "seres humanos, seres amantes de la fuente de vida (la naturaleza), sin fobias, miedos, egos, maldades y prejuicios de nuestro método lógico de pensamiento.

Por los extremos de la idiotez de la naturaleza humana, como lo dice Aldous Huxley en el prólogo de su libro "A Brave New World", nos veremos sometidos al olvido del amor y seguidamente se adoptaran medidas que castren el desarrollo del hombre histórico y sus melódicos visos de igualdad.

La xenofobia, la exclusión del avance científico, el racismo disfrazado, la producción de armas y muchas otras constantes de nuestra contemporaneidad, son suficientes para creer que la salida pacífica es una utopía, y si observamos el mundo científicamente dividido y comprobable, a lo Bertrand Russell, con dolor y maldad, actuaremos imperfectamente y cabalmente aminorando los daños con recursos robóticos o mejorados genéticamente en pos del desarrollo tecnológico y en detrimento de la evolución del ser espiritual.

El destino trágico del hombre se funde con su diario vivir. Sus quejas se atienden con materia útil pero ¿y esas preguntas trascendentes qué? Pues simplemente se arrinconan y se sustituyen con juegos de valor y responsabilidad lógica, de cara apática y repetitiva.

La buena conducta, la aceptación de reglas decadentes, la vanalidad de los argumentos, la discusión intelectual y el mismo aprendizaje son motivo de la dicotomía mundial y su aplicación es coercitivamente alienadora y perpetuadora de estrategias dialécticas promisorias con base en el dinero.

La verdad, no es verdad cuando de materialismo seglar se habla pero si lo es cuando la visión del mundo se coloca en el centro de la fe. Las reflexiones de un mundo materioespiritual son ilógicas pues lo uno no encaja en lo otro y sin importar cuánto se sepa sobre un tema trascendente hay que mantener por delante la convicción de que somos seres subjetivos y emocionalmente ligados al mundo concreto, con las viscitudes de los miedos creados en contra del concepto de la muerte o simplemente con los egos de nuestra opulenta superioridad.

Focos de partida para el desorden, muchos. Empezando por nuestro país y su desarrollo histórico.
El cumplimiento pederástico en cada dinastía desde la conquista, y la oscuridad del exterminio ancestral, tejen el tapete de las inconformidades que son foco de rebelión y delante de éste la censura y el nuevo exterminio con cara de policía y contenidos de guerra mediáticos.
No es gratis que la pluricultura empuje hacia un nuevo orden pues su mezcla dispara la psicología de la mente mestiza, agobiada por las facetas del desarrollo empacado en señales fotónicas incitadoras de deseos fútiles e innecesarios, pero entrelazados con la oportunidad del desarrollo comunitario basado en lo escaso para así conformar la necesidad de la cultura como legalizador de las practicas sociales.
Hay que ser concientes que nuestra implosión grupal es producto de la desinformante mano telecomunicativa del acelerado modernismo, que como un dulce atrae y corroe el legado oral de la tierra.
El mundo paralelo que vive la urbe con respecto a los problemas del campo, son el velo que impide la captación real de los acontecimientos. Nuestro tiempo inventado produce rechazo a lo que no da plata y nuestra formación humanística se superpone al conocimiento superficial de los datos que son útiles para las ocupaciones citadinas.
Un estudio objetivo del asunto ubicaría en igualdad de condiciones a millones de ciudadanos tercermundistas, desde la Suramérica indígena, pasando por los inmigrantes, hasta los camboyanos, vietnamitas, palestinos, nigerianos, vascos, socialistas, comunistas, servios etc., que conforman un alto porcentaje de población relegada y sometida al yugo de la oscuridad transnacional y tecnócrata, demostrando que la calidad de vida mejoró para unos pocos y se deterioró para los muchos restantes. En este punto, ¿cuál es la razón de tanta desigualdad si la promesa del desarrollo incluye la integridad de toda la raza humana? --- Reflexiones se escribirán, hipótesis se formularán y soluciones extremas conducirán a nuevos paradigmas. La verdad se ve dividida y amenazada por la ambición de los hombres y sus juegos de poder, además la prisa amerita archivar y dinamizar las conductas habituales generando y sistematizando muros conceptuales que ciegan la unidad de la verdad.
Ya lo había planteado y lo escribo de nuevo, "el hábito de consumo de las sociedades es la guerra" y así ni la paciencia ni el ritmo ni el equilibrio son viables.
Vamos a ver cuántas más reflexiones se escribirán, vamos a ver cuántos más pensamientos se van a plantear, el hecho, es que la palabra está gastada y la palabra - acción - trasciende los signos y los planteamientos, pero siempre los actos contradicen las claves de nuestra supervivencia, actos preescritos, actos instintivos que nunca dicen la verdad.